Vivimos en una época en la que la mayor parte de nuestras tareas diarias se basan o necesitan de un smartphone, una tablet o un ordenador. Y los niños han adoptado también los hábitos de sus padres y las prácticas que ven en casa.
Los niños, desde los más pequeños, están acostumbrados a leer en pantalla y a buscar toda la información que necesitan en cualquiera de los dispositivos electrónicos ya citados. El smartphone o la tablet son la base, en muchos casos, de su entretenimiento y a veces de su educación.
Por supuesto esto no es negativo, ya que los aparatos electrónicos les ofrecen muchas posibilidades de desarrollar su creatividad y aumentar sus conocimientos. Pero nuestro consejo es que los niños mantengan siempre contacto con los libros y se acostumbren a hacer anotaciones y planificar sus tareas con una agenda escolar.
Las agendas 2015 no son sólo necesarias para los adultos, sino que su uso es muy productivo y muy aconsejable para niños en edad escolar, principalmente por las siguientes razones:
– Les ayuda a comprometerse y a cumplir tareas. El hecho de tener una agenda y obligarles a que anoten al menos los deberes que les mandan los profesores, hace que los niños adquieran un compromiso, no sólo de anotar, sino también de hacer.
– Les ayuda a ser más responsables. La agenda escolar es una agenda personal que deben llevar todos los días del colegio a casa y de casa al colegio. El simple hecho de tener que transportarla sin que se pierda ni se deteriore, hace que el niño desarrolle su responsabilidad.
– Es un medio de comunicación de entre padres y profesores. La agenda es un instrumento sencillo y barato que la familia del alumno y sus padres puedan estar en constante comunicación sin necesidad de verse a menudo. En ella, tanto una parte como la otra, pueden dejar mensajes referentes al desarrollo escolar del niño o posibles incidencias, comentarios y consultas.
– Les ayuda a organizarse. La razón de ser principal de las agendas es la planificación. Por eso los niños que adquieren el hábito de utilizarlas organizan su tiempo de estudio, sus tareas y también su tiempo libre mucho mejor.
– Les ayuda a ser más productivos. Uno de los primeros consejos que te dan cuando quieres aumentar tu productividad es eliminar «cosas que tengo que hacer» de tu cabeza y anotarlas en una agenda. Al escribirlas, las eliminas de tu memoria y ganas espacio para cosas que realmente necesiten recordar. Pues bien, si los niños se acostumbran desde pequeños a anotar las tareas que tienen que hacer, tendrán una gran parte del camino recorrido.