La mayoría de personas quienes siguen y disfrutan del universo del fútbol han escuchado hablar sobre los representantes de los futbolistas, ellos son figuras dentro de este deporte con una enorme responsabilidad dentro del éxito de la carrera de cada jugador.
Asimismo, pueden ofrecer sus servicios a solo un jugador o a varios de ellos de manera simultánea y también son llamados agentes de fútbol. Ellos son los encargados de llevar a cabo todas las negociaciones necesarias y de ofrecer las mejores oportunidades de empleo a cada jugador.
Pero esta es una definición muy simple de lo que significa o implica su rol, su trabajo tiene que ver con acciones más amplias, debe procurar los mejores escenarios para el futbolista en el terreno de juego y fuera de él, es decir, tanto en su vida profesional como personal, entre sus funciones específicas se encuentran:
● Realizar la gestión de la carrera del jugador: tiene que manejar cada una de sus actividades y ayudarle a que se mantenga en óptimos niveles de desempeño, así como orientarlo para la toma de las mejores decisiones para su carrera deportiva.
● Llevar a cabo la negociación de los contratos: teniendo en cuenta que cada jugador debe firmar un contrato con el club, lograr el mayor número de beneficios con la firma de cada contrato, por ejemplo el más alto salario, ventajas a partir de su rendimiento, entre otros.
● Negociar las transferencias de un equipo a otro: en ocasiones se hace necesario el paso de un jugador de un club a otro, este es uno de los aspectos en los que la labor del representante del futbolista es crucial, debe procurar el mejor convenio entre ambos clubes.
● Gestionar el área económica: los representantes también toman parte en lo que tiene que ver con la gestión de las finanzas, para que su cliente administre sus ingresos de la mejor forma posible. En este sentido, también actúa para garantizar económica a la hora de que el jugador decida retirarse del deporte, pero pueda continuar manteniendo una adecuada calidad de vida.
● Ayudar a garantizar la disciplina: la disciplina es clave para cualquier futbolista, tanto en el campo de juego como fuera de él. En caso de cometer alguna falla el club y las asociaciones de fútbol puede expulsarlos por algún tiempo o aplicarles una multa. El representante debe estar siempre allí para impedir que esto suceda y en caso contrario, garantizar que el jugador cumple con su sanción.
● Coordinar sus relaciones públicas: una vez que los futbolistas alcanzan cierto reconocimiento, de inmediato se ganan el interés y la atención de todos los medios de comunicación, así que es primordial que cuente con una excelente imagen y el representante debe ayudarle a crearla y mantenerla. Incluso, tiene que gestionar sus actividades personales y apoyarle en este aspecto.
En resumen, los representantes de los futbolistas son quienes trabajan y hacen todo lo necesario para garantizar que sus clientes tengan el mejor desarrollo profesional a la par de una exitosa vida personal, su trabajo es garantizar su bienestar.